Llevo más de 20 años siendo fotógrafo y videógrafo de bodas en Sevilla. En todo este tiempo, he visto de todo: desde bodas que fluyen como un sueño hasta otras donde los novios no sabían si reír o llorar de la cantidad de problemas de última hora. Y hay algo que he aprendido en este tiempo: contratar a un wedding planner es una de las mejores decisiones que puedes tomar para tu boda.
Voy a ser directo: un wedding planner no solo te ahorra tiempo y estrés, sino que hace que todo sea mucho más fácil. Desde mi experiencia, las bodas donde hay un profesional encargado de la organización y supervisión son mucho más fluidas y los novios disfrutan muchísimo más. Al final, la boda es para vosotros, no para que estéis gestionando proveedores o resolviendo problemas en el último minuto.
La tranquilidad no tiene precio
Imagina esto: llega el día de tu boda, estás a punto de vestirte, y alguien te dice que el florista está retrasado, o que el DJ no encuentra el lugar. Créeme, lo he visto más veces de las que me gustaría. Aquí es donde un wedding planner es clave. Se encargan de todo lo que puede salir mal (y créeme, siempre hay algo), mientras tú disfrutas del momento. Y yo, como tu fotógrafo y videógrafo de bodas, puedo concentrarme en capturar esos instantes únicos, en lugar de estar pendiente de que todo esté en su lugar.
Los contactos lo son todo
Otra ventaja brutal de tener un wedding planner es que ya tienen todo un arsenal de proveedores de confianza. Si no tienes claro a quién contratar para las flores, el catering o la música, ellos te lo ponen fácil. Como fotógrafo, también he trabajado con muchos de ellos, y cuando hay coordinación y se conocen entre sí, todo fluye mejor. Y eso, al final, se traduce en que yo puedo sacar las mejores fotos y vídeos de tu gran día, sin interrupciones.
Tu boda, tu estilo
¿Sabes lo que más mola de trabajar con un wedding planner? Que ellos se encargan de materializar tu visión. Muchas veces los novios me dicen que tienen mil ideas en la cabeza pero no saben por dónde empezar. Ahí es donde entra el planner: se sientan contigo, entienden lo que quieres y lo convierten en realidad, ajustándose a tu estilo y presupuesto. A mí me encanta cuando llego a una boda y veo que todo está pensado al detalle porque sé que esas fotos van a ser espectaculares.
El día de la boda, solo a disfrutar
Una boda tiene muchísimos momentos especiales, desde el «sí, quiero» hasta la primera vez que entras en el banquete con tus invitados aplaudiendo. Si hay un wedding planner, tú solo te tienes que preocupar de disfrutar de esos momentos, mientras yo me ocupo de capturarlos para que puedas revivirlos una y otra vez en fotos y vídeo. Sin wedding planner, muchas veces los novios están nerviosos o pendientes de los detalles, y eso se nota. Créeme, las mejores fotos salen cuando los novios están relajados y felices.
Entonces, ¿vale la pena un wedding planner?
¡Por supuesto! Después de todos estos años como fotógrafo y videógrafo de bodas en Sevilla, puedo decir que las bodas que cuentan con un wedding planner son más organizadas, fluidas y, lo más importante, ¡los novios disfrutan mucho más! Y al final, eso es lo que cuenta: que tengáis un día inolvidable, lleno de momentos especiales, sin estrés y con todos esos recuerdos capturados en fotos y vídeos para siempre.
Así que, si me permites un consejo, si quieres que tu boda en Sevilla salga perfecta, invierte en un buen wedding planner. Y ya sabes, para que todo quede inmortalizado en imágenes, aquí estaré yo para ayudarte.