
¿Eres de los que considera a tu perro o gato parte de la familia? Entonces seguro que estás soñando con incluirlo en tu gran día. Tranquilo, no eres el único. En los últimos años, cada vez más parejas deciden que sus mascotas sean testigos (¡y protagonistas!) de su boda. Pero, como todo en la vida, incluir a tu peludo tiene su miga. Aquí te dejo unos consejos para que sea todo un éxito:
Evalúa su personalidad y bienestar
Antes de nada, piensa en tu mascota. ¿Es tranquila y sociable o se estresa con facilidad? Si es de los que no paran quietos, tal vez lo mejor sea que esté solo en ciertos momentos de la boda o que participe de forma simbólica, como en una sesión de fotos previa. Lo más importante es que esté cómodo.
Elige un papel especial para tu mascota
No hace falta que sea el encargado de llevar los anillos (aunque sería adorable). Puedes asignarle otro rol, como acompañarte en la entrada, posar para algunas fotos o estar presente en la ceremonia como invitado de honor. Si prefieres algo más discreto, siempre puedes incluirlo en pequeños detalles, como en el diseño del pastel o las invitaciones.
Viste a tu mascota (pero con cabeza)
Si decides ponerle un lacito, una pajarita o un pequeño atuendo, asegúrate de que sea cómodo y que no le cause molestias. Recuerda que menos es más. Lo importante es que pueda moverse libremente y que no pase calor.

Designa un cuidador para el gran día
Tus manos estarán ocupadas, y tu atención, dispersa. Por eso, asegúrate de que alguien de confianza se encargue de tu mascota durante el evento. Puede ser un familiar, un amigo cercano o incluso un cuidador profesional. Ellos se encargarán de pasearlo, darle de comer y, en general, asegurarse de que esté bien.
Ten un plan B (por si acaso)
Aunque sueñes con que tu peludo esté contigo todo el día, a veces las cosas no salen como planeas. Ten prevista una zona tranquila donde pueda descansar si se agobia o incluso un lugar donde pueda quedarse si ves que no está disfrutando.
Consulta con el lugar y proveedores
Antes de decidir nada, asegúrate de que el lugar donde celebrarás la boda permite mascotas. También habla con los fotógrafos, videógrafos y demás proveedores para que estén al tanto y puedan adaptarse.
Sesión de fotos con tu mascota: un recuerdo único
Si prefieres no incluir a tu mascota en la ceremonia, puedes organizar una sesión de fotos previa o posterior a la boda. Imagina tener imágenes de tu perro con un letrero que diga “Mis humanos se casan” o de tu gato curioseando el ramo. ¡Quedarán preciosas!
Detalles personalizados para los invitados
Si tu mascota no puede estar presente, siempre puedes incluirla en los detalles del evento: ilustraciones de ella en las invitaciones, galletas con su forma para los invitados o incluso nombres de mesas inspirados en su personalidad.
Tu mascota, siempre parte de tu historia
Incluir a tu peludo en tu boda puede ser una de las decisiones más especiales que tomes. Con un poco de planificación, mucho cariño y pensando siempre en su bienestar, ¡será un recuerdo inolvidable para todos!